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Guerrero no está preparado para dar trabajo a los deportados, admite gobernador

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En caso de que las deportaciones prometidas por el gobierno de Donald Trump, se lleguen a realizar de forma masiva, Guerrero no está preparado para dar trabajo a los afectados, señaló Héctor Astudillo Flores, gobernador de esa región.

Durante su visita de dos días a Los Ángeles y San Diego, Flores admitió ante el periódico Hoy que ni Guerrero “ni ningún otro estado del país tiene la capacidad como para recibir a las personas con puestos de trabajo disponibles”. De hecho, “sería una mentira decir que estamos listo para recibir a todos, pero creo que tenemos que encontrar una ruta dependiendo de la capacitación” de cada persona, agregó.

En Estados Unidos radican más de 1.5 millones de guerrerenses distribuidos principalmente entre Chicago y Los Ángeles.

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El funcionario recalcó que se sabe de antemano que miles de inmigrantes guerrerenses trabajan en Estados Unidos en rubros como el campo, restaurantes y la construcción; “son en esos lugares que debemos encontrar un espacio para que la gente pueda laborar en Guerrero.

A pesar de esta noticia poco alentadora para los mexicanos, Flores aclaró que su administración ya se está preparando para atender a la comunidad inmigrante en otros ámbitos.

Por ejemplo, “ya está disponible una ventanilla de salud para atender a la gente. También tenemos un programa de educación en pie para recibir a los niños en Acapulco y Chilpancingo”, dijo Flores al mismo tiempo que le pidió a la comunidad no tomar las amenazas de Trump como hechos consumados.

Respecto a Guerrero, uno de los estados con mayor criminalidad en México, Flores admitió que la región es “un escenario de tragedia, especialmente con los 43 estudiantes desaparecidos” de los que ni las autoridades saben su paradero, pero señala que así como tiene problemas, también tiene mucho que ofrecer.

“Todos los días, las autoridades se enfrentan a las bandas criminales; en los últimos años hemos detenido una gran cantidad de personas que están en la delincuencia y el gobierno está determinado, con la ayuda de federación, a seguir enfrentado el grave problema”, sostiene.

“Tenemos atractivos muy buenos como Acapulco e Ixtapa Zihuatanejo. De hecho, seguimos siendo sede de varios eventos deportivos como el Tenis, eventos en la zona costera y las lagunas y el Tianguis Turístico”.

Flores añadió que la violencia no ha afectado al turismo de ninguna forma. Inclusive, señala, la región sigue siendo “uno de los puntos centrales de visitas de canadienses y norteamericanos más grande del país”.

Flores se despidió de los guerrerenses que viven en Los Ángeles diciendo: “Hay que ver las cosas con serenidad. No se dejen invadir por el miedo. Creo que el presidente de Estados Unidos está haciendo el trabajo que quiere, pero hay cosas que se pueden hacer y cosas que no. Le puedo decir a mis paisanos que estén atentos a lo que viene”, enfatizó Flores.

El funcionario acotó que “el gobierno mexicano, empezando por el presidente Enrique Peña Nieto y todos los gobernadores sin limitación de origen partidista, estamos en la misma ruta de defender los derechos de los paisanos en Estados Unidos. Hay que recordar que la contribución de los mexicanos en este país es muy importante, y el primero que debe tenerlo presente es Trump”.

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