Golpe contra fábricas de ropa por violaciones: ‘No va a parar mientras haya gente deseosa de comprar’

Las autoridades arrasaron con multas en contra de las fábricas de ropa angelinas con múltiples violaciones; de esa forma les advirtieron al resto de negocios similares que nadie puede burlar las leyes.

En total fueron 14 fábricas en Los Ángeles las que la Oficina del Comisionado de Trabajo de California sancionó, al emitir este mes multas por un total de 372,135 dólares.

Asimismo, los investigadores también confiscaron 5,725 prendas fabricadas ilegalmente, con un valor estimado en la calle de 103 mil dólares, de seis de los 14 negocios multados.

Dado que la ropa confiscada en operaciones ilegales no puede ser vendida, los artículos serán donados a una agencia sin fines de lucro para su diseminación a refugios y víctimas de violencia doméstica en el área de L.A., según la comisionaría Julie A. Su.

“Los fabricantes de ropa que frustran la ley amenazan los derechos de los trabajadores y a los empleadores honestos de la industria, lo que dificulta la legitimación de empresas”, sostiene Su.

“Estas entidades ilegales deben tomar nota: Vamos a sacarlos a la luz sobre la economía subterránea que manejan. Además, los que hacen negocios con los contratistas no registrados también serán responsabilizados”, agregó la comisionada.

Entre las violaciones, se encontraron siete empleadores que operaban sin seguro de compensación laboral y la evasión de registro de negocio como fabricante de prendas de vestir.

Asimismo, se descubrió la creación de ropa de imitación de marca, el mantenimiento de récord requeridos para operar y la imposibilidad de exhibir el registro de prendas.

Marisela N., una trabajadora que pega botones para los pantalones de mezclilla en una fábrica local, sostiene que aunque su empleador no fue multado, los verdaderos afectados son los trabajadores.

“Las fábricas obtienen multas, pero despiden a algunos trabajadores para compensar sus pérdidas”, dice Marisela, quien no quiso dar su apellido.

“Aunque las fábricas están violando leyes, algunos trabajadores lo saben y lo aceptan porque ahí pueden conseguir empleo para sostener a sus familias”, agregó.

Fernando Pimentel, quien compra ropa por mayoreo para algunas de estas fábricas, sostiene que en estos casos los negocios que le proveen las prendas se las venden a un precio más alto.

“Este tipo de negocio no va a parar mientras haya gente allá afuera deseosa de comprar ropa bonita, barata, a la moda y que son copias de marca”, dice Pimentel.

La Ley de fabricación de prendas de vestir de 1980 exige que toda las industrias se registren con el Comisionado de Trabajo y demuestren carácter, competencia y responsabilidad, incluida la indemnización de los trabajadores y la cobertura del seguro.

Los empleados con preguntas o quejas relacionadas con el trabajo pueden llamar al Centro en inglés o español al teléfono 1.844.522.6734.