Jimmy Morales, presidente electo de Guatemala, se lleva quejas y peticiones de L.A.

La visita de Jimmy Morales a Los Ángeles, ahora como presidente electo de Guatemala, sirvió para medir los retos que tendrá su gobierno a partir de enero, un territorio que según activistas deberá abordar con pinzas porque es una caja de resonancia.

Durante una hora, el excomediante interactuó y se tomó fotografías con sus compatriotas en el consulado local, además de contar un par de chistes de su repertorio; sin embargo, la comunidad aprovechó para exponer sus inquietudes.

“Vengo a escuchar de primera mano los comentarios, a veces llegan tergiversados, es como un teléfono descompuesto; es mejor venir a escucharlos aquí y llevando la problemática se podrá hacer el diagnóstico”, explicó a HOY sobre su visita.

Morales llegó al Sur de California el domingo, en ocasión del aniversario de ministerio del obispo bautista Juan Carlos Méndez; no obstante, este lunes aprovechó de recorrer la oficina que a partir del 14 de enero le rendirá cuentas a su gobierno.

De entrada, afirmó el mandatario electo, la población le planteó quejas, felicitaciones, solicitudes y necesidades, entre las que sobresalen la urgencia de una entrega rápida del pasaporte y el Documento Personal de Identificación (DPI).

“Hemos contemplado, para el año entrante, llevar el DPI a los consulados móviles”, advirtió sobre el trámite que en este momento no cuenta con el personal suficiente, pese a la alta demanda de los guatemaltecos en el Sur de California.

Asimismo, a pocos días para tomar posesión del cargo, aseguró que todavía mantiene en reserva su gabinete. “Está [definido], pero no lo hemos anunciado porque se está siguiendo un proceso de investigación”, indicó en una breve entrevista.

A simple vista, Morales parece estar empapado de los problemas de su comunidad, así como de la necesidad de nuevas instalaciones y conoce sobre la suspensión temporal de citas del DPI; sin embargo, no abundó en compromisos.

“Queremos decirle [a los migrantes] que los 15 millones de guatemaltecos les queremos y admiramos, y desde la administración de Jimmy Morales en la presidencia lucharemos para que tengan una mejor atención en toda la red consular”, aseveró.

A raíz de la crisis política en Guatemala, luego de la renuncia del presidente Otto Pérez Molina implicado en el caso de corrupción conocido como ‘La Línea’, los migrantes chapines son más inquisitivos y siguen de cerca lo que pasa en esa nación.

Edgar López, oriundo de Santa Rosa, se fotografió con el mandatario electo, pero no se cree todo el discurso ni el comportamiento de Morales.

“Comienzan bonito, abrazando al montón de pobres, luego no se acuerdan”, manifestó López. “Lo que quiero ver es que resuelva el problema de la delincuencia y que cree más oportunidades de empleo al interior del país”.

A otros ciudadanos les preocupan los servicios consulares. Mario Orozco, por ejemplo, cuestionó la calidad del servicio y aduce que la cantidad de empleados no es suficiente para atender toda la demanda del público.

“En vez de ir para arriba van para abajo, el trato no es bueno. Deberían poner personas capacitadas, no por cuello”, señaló el usuario, a pocos minutos que se retirara Morales, entre algunos de los que expresaban malestar por la tardanza en la atención.

Por otro lado, Aldo Waycan, locutor de origen indígena, observa que a pesar de existir una amplia comunidad maya en Los Ángeles, el consulado no cuenta con ningún funcionario de esa ascendencia.

A juicio del productor del programa Derechos Ahora, en la radio Jolom Konob, los grupos Mam, Quiché y Q’anjob’al en su mayoría no hablan español, lo que les dificulta obtener un servicio.

“Se debería tener a alguien que hable maya y un servicio de traductores, esta es una discriminación para los pueblos indígenas”, manifestó el comunicador como reto para la nueva administración.

Entretanto, el tema más espinoso para el gobierno entrante será las relaciones con los diferentes sectores organizados en L.A., asociaciones activas y críticas, pero al mismo tiempo dispersas.

En principio, los líderes de las 17 entidades aglutinadas en la Coordinadora de Organizaciones Guatemaltecas en Los Ángeles (Cogla) esperan que Morales no base su gestión únicamente en los apoyos que obtuvo en la campaña electoral.

“No estamos sentidos, pero lamentamos que no se nos informó de la visita, a pesar de que tuvimos una reunión con el cónsul el viernes anterior”, reconoció Julio Villaseñor, presidente de Cogla.

“Como candidato lo pudo haber apoyado un sector, pero ahora es el presidente de todos los guatemaltecos; debe escucharnos a todos, porque él necesita el aporte de todos para resolver los problemas”, aseguró Villaseñor.