Condenan a individuo que raptó y violó a niña de dos años

Un tribunal estatal de apelaciones confirmó la condena de 55 años de prisión para un sujeto, por agredir sexualmente a una niña de 2 años, tras secuestrarla de un automóvil en la ciudad de Gardena.

El abogado del ofensor, Michael David Ikeler, sometió la defensa de su cliente diciendo que un juez erró en imponerle varias sentencias consecutivas, pero el panel de tres jueces del Segundo Tribunal de Apelaciones del Distrito de California rechazó la defensa.

La evidencia mostró que Ikeler, residente de Torrence “cometió múltiples delitos sexuales” contra “una niña incapaz de verbalizar o explicar lo que le hicieron’’.

Estudios encontraron que el ADN del acusado se encontraba por todas partes “del cuerpo de la menor”, según el fallo de 14 páginas del panel.

Los jueces también rechazaron la afirmación de la defensa, de que las declaraciones Ikeler fueron hechas a un detective que investigaba el ataque, sin informarle sus derechos de permanecer en silencio. El panel señaló que este no se encontraba bajo custodia cuando confeso.

El ataque de la menor fue un 2 de abril del 2015. La pequeña estaba con su madre y su hermana mayor en un túnel de lavado de autos, en el 14929 Western Ave., cuando desapareció.

La madre, cuyo nombre no fue revelado, estaba lavando su auto cuando escuchó a la niña gritar “mamá”, solo para darse la vuelta y descubrir que su hija ya no estaba donde la dejó.

Más de 50 voluntarios, clientes y residentes locales se sumaron a explorar el área en busca de la menor, la cual fue encontrada desnuda, cerca de un contenedor de basura aproximadamente unas dos horas y media más tarde, en un estacionamiento vacío, en Cudahy.

Los testigos dicen que tenía arañazos en las piernas y que estaba gritando, y poniéndose las manos sobre los ojos.

La policía de Gardena dijo que recibió un aviso que los llevó a Ikeler, quien fue arrestado una semana después.

Ikeler testificó en su propia defensa durante el juicio y negó haber secuestrado o agredido sexualmente a la niña, diciéndole al jurado que un primo traficante de drogas había tomado prestado su auto.

Ikeler fue declarado culpable en enero del 2017, de un cargo de cometer un acto lascivo contra una menor, y dos cargos de penetración sexual con una niña menor de 10 años de edad.