Adolescentes con trastornos mentales reciben asistencia en el condado de Orange

Los adolescentes con problemas de estrés postraumático, ansiedad, depresión y otros desordenes complejos de la mente que viven en el condado de Orange, podrán conseguir ayuda de salud y tratamiento necesario, de acuerdo a la Junta de Supervisores del condado.

La junta aprobó este martes el contrato de servicios de salud mental de 24 millones de dólares para jóvenes de 13 años de edad en adelante con Exodus Recovery Inc, una agencia de salud afiliada con St. Joseph Hospital en Orange.

La meta de la inversión, sostienen funcionarios de la junta, es darle a las autoridades otra opción comprensiva para los adolescentes con enfermedades en lugar de las cárceles juveniles o un centro en Santa Ana, que solo tiene 10 camas para adultos con enfermedades mentales.

“La población a la que nos dirigimos son adolescentes arriba de los 13 años de edad. Los adultos mayores que experimentan emergencias siquiátricas no pueden esperar a los especialistas para hacer citas y corren el riesgo de de hospitalización o quedarse sin hogar”, sostiene el reporte presentado a los supervisores.

La unidad de estabilización de crisis ayudará a los pacientes que se presenten con las autoridades para obtener los servicios de evaluación psiquiátrica, examen físico, medicamentos, historia colateral, terapias, intervención de crisis, evaluación de enfermería, coordinación de referencias a cuidados continuos y vivienda de emergencia.

En el lugar también se les asistirá con planificación y facilitación de la transferencia a instalaciones de tratamiento de pacientes hospitalizados si se requiere.

Para la junta, la ayuda es imperativa, ya que muchos jóvenes no está consiguiendo el apoyo que necesitan para tratarse saludablemente, por lo que en su vida adulta pueden terminar como indigentes o en la prisión al cometer delitos mayores, sostiene el reporte.

Según datos del Mental Health America, una organización sin fines de lucro nacional que aboga por la salud mental de los adolescentes, el 64.1 por ciento de estudiantes de preparatoria en la nación, no recibe ayuda mental al experimentar depresión y el 77 por ciento experimenta algún episodio emocional que no es tratado.

Rosa Fuentes, activista local, sostiene que este tipo de servicios tuvo que haberse puesto en pie hace mucho tiempo.

“Ya hemos perdido a varios jóvenes en las drogas, la indigencia y la prisión. La salud mental es algo que muchas familias, especialmente latinas aún no comprenden y no saben cómo lidiar con los menores”, dice Fuentes.

“La comunidad espera que los funcionarios no se queden estancados en sus promesas, sino las cumplan como prometen, para eso los elegimos con nuestro voto”, agrega.

Las instalaciones abren sus puertas a partir de julio para recibir jóvenes con Medi-Cal y también aquellos que cuentan con seguro privado.