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Gobernador de Connecticut apoya a guatemalteca refugiada en iglesia

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El gobernador de Connecticut, Dannel Malloy, expresó su apoyo a una guatemalteca que el jueves decidió refugiarse en una iglesia de ese estado para evitar ser deportada, informaron hoy medios locales.

Nury Chavarría, de 43 años, madre de cuatro hijos y sin antecedentes penales, que llegó a Estados Unidos hace 24 años, iba a salir del país el jueves después de haber sido notificada en junio que tenían cinco semanas para abandonarlo.

Sin embargo, camino del aeropuerto le ofrecieron la posibilidad de trasladarse a una iglesia de New Haven, una ciudad que se ha convertido como santuario de inmigrantes, y decidió refugiarse allí, donde fue visitada anoche por el gobernador del estado.

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Malloy rechazó que pueda ser “explicable” esta situación, ya que Chavarría no tiene antecedentes penales, una de las excusas que está utilizando la Administración de Donald Trump para dar prioridad a la deportación de indocumentados.

“Lo que nos han dicho no parece ser verdad, y la prueba viviente está en esta iglesia”, dijo Malloy, gobernador demócrata, en declaraciones reproducidas por la cadena CBS.

“Cuando a los estadounidenses no les dicen la verdad -agregó-, cuando están siendo mal informados por su gobierno, vivimos en una época peligrosa”.

Los cuatro hijos de la mujer son ciudadanos estadounidenses. Uno de ellos, de 21 años, tiene parálisis cerebral. Si Chavarría abandona Estados Unidos perdería el contacto con sus hijos y también con sus padres, que igualmente residen en el país.

La ciudadana guatemalteca dijo anoche a Efe que su decisión de refugiarse en la iglesia fue lo mejor que pudo hacer.

“Estaré aquí hasta que Dios quiera y esperando que las cosas cambien, no sólo por mi vida sino la de mucha gente que está siendo deportada injustamente”, afirmó Chavarría.

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