EEUU asegura que China está de su lado frente a Corea del Norte

Estados Unidos aseguró hoy, al término de una primera reunión de alto nivel sobre diplomacia y defensa bilateral, que China comparte en líneas generales su política frente a las provocaciones de Pyongyang, que sigue teniendo en Pekín su mayor aliado.

El encuentro, encabezado por el secretario de Estado Rex Tillerson y el secretario de Defensa James Mattis, en el lado estadounidense, y el ex consejero de Estado Yang Jiechi y el jefe del Estado Mayor del Ejército Fang Fenghui, en el lado chino, concluyó con una breve declaración.

Sin la presencia de la delegación china, Tillerson y Mattis aseguraron que Pekín comparte su postura de que es necesario que el régimen de Kim Jong-un ponga fin a su programa nuclear.

Tillerson aseguró que ambos países hacen un llamamiento para “una desnuclearización completa, verificable e irreversible en la Península de Corea” y piden a Corea del Norte que se adhiera a las demandas de las resoluciones de las Naciones Unidas sobre no proliferación.

Tillerson aseguró que China, el gran aliado diplomático y comercial de Pyongyang, “entiende” que Corea del Norte es la mayor amenaza a la seguridad en Asia-Pacífico y que ambos países consideran que ninguna de sus empresas debe hacer negocios con compañías norcoreanas sujetas a sanciones internacionales.

Mattis aseguró que en lo que respecta a no proliferación nuclear en la Península de Corea las posturas de los dos países “son las mismas”.

No obstante, desde 2006 Corea del Norte ha realizado cinco ensayos nucleares subterráneos, el último tres meses antes de las elecciones generales de 2016 en las que Donald Trump se hizo con la Presidencia de Estados Unidos.

La Administración del mandatario republicano no ha descartado la vía militar, pero ha pedido a China ayudar para presionar al régimen de Kim Jong-un, que ha realizado en los últimos meses varios ensayos de misiles, a volver a la mesa de negociación.

Las posibilidades de acercamiento con Pyongyang se han torcido aún más con la muerte hace dos días del estudiante estadounidense Otto Warmbier, una semana después de que regresase de Corea del Norte en coma, donde estuvo preso acusado de robar un cartel de propaganda.

Mattis criticó a Corea del Norte por su desprecio a “la ley y el orden, la humanidad y la responsabilidad” básicas que se esperan de un país, después de la muerte de Warmbier, que la familia atribuye a maltrato en prisión y los norcoreanos al botulismo, algo que los médicos estadounidenses descartaron.

El propio Trump afirmó este martes que valora los esfuerzos de China para contener al régimen de Corea del Norte, pero que, en su opinión, “no han funcionado”.

“Aunque aprecio enormemente los esfuerzos del presidente Xi (Jinping) y China para ayudar con Corea del Norte, no han funcionado. ¡Al menos yo sé que China lo intentó!”, declaró Trump a través de su cuenta personal de Twitter.

El encuentro de hoy es el primero bajo un nuevo marco de contactos de alto nivel establecido por Trump y su homólogo chino, Xi Jinping, en abril, durante una reunión en Mar-a-Lago, el club propiedad de la Trump Organization en Palm Beach (Florida).

Según Tillerson y Mattis, la reunión de hoy sirvió para definir áreas de interés mutuo en las que ambos países pueden cooperar, tanto a nivel diplomático como en el plano militar, como en la lucha contra el terrorismo o la ciberseguridad.

Tillerson también aseguró que han transmitido a sus contrapartes chinas que no rebajarán su presión a la hora de trasmitir su preocupación por el respeto a los derechos humanos en China, algo a lo que Trump no ha dado prioridad en sus pronunciamientos públicos.

Mattis confesó que las mayores diferencias se dieron hoy en lo referente a las disputas en el Mar de China Meridional, donde China ha reforzado su presencia con la ampliación de islas artificiales que han elevado las críticas de Filipinas, Vietnam o Malasia.

A ese respecto, aseguró el jefe del Pentágono, “hemos identificado áreas en las que podemos trabajar juntos y comprender dónde hay desconexión, donde nuestro entendimiento es diferente al de ellos”.

Tillerson, en un tono diplomático, aseguró que EEUU se opone “a cambios en el estatus quo a través de la militarización de enclaves en el Mar de China Meridional y excesivas demandas que no estén basadas en le ley internacional”.