Celebran en Anaheim misa por santificación de Monseñor Romero

Hoy Los Angeles

Mar. 17, 2018 7:58 AM PT

Miles de feligreses celebraron durante un oficio religioso en Anaheim, al sureste de Los Ángeles, la próxima santificación del obispo salvadoreño monseñor Oscar Romero, asesinado el 24 de marzo de 1980.

Celebrada por el cardenal de El Salvador, Gregorio Rosa Chávez, y junto al arzobispo de Los Ángeles, José Gómez, en el acto eucarístico se destacó la abnegada labor de Romero en defensa de los pobres y los más necesitados siguiendo los criterios católicos de justicia social.

“Era un hombre incómodo para los impíos, es decir, para quienes vivían de espaldas a Dios. Por eso usaron contra él toda clase de armas”, señaló en su homilía el cardenal Rosa Chávez al hacer un paralelo del sacrificio de Romero con la persecución a Jesús.

El pasado 7 de marzo, el Papa Francisco firmó el decreto del milagro por intercesión de monseñor Óscar Arnulfo Romero, por el que será proclamado santo.

La beatificación de Romero, asesinado mientras ofrecía misa en la capilla del Hospital de la Divina Providencia, se había proclamado ya con un decreto en el que se reconocía el “martirio” de Romero “in odium fidei”, es decir, que fue asesinado por “odio a la fe” y por tanto sin necesidad de un milagro.

Durante sus tres años como arzobispo, Romero denunció la violencia y se pronunció a favor de las víctimas de la guerra civil en El Salvador, la cual cobró la vida de al menos 70,000 personas.

El arzobispo también defendió el derecho de los pobres a exigir un cambio político, una posición que lo convirtió en un adversario para los gobernantes del país.

“Nosotros deseamos que la canonización de monseñor Romero nos traiga a El Salvador el milagro de la paz”, dijo a Efe el cardenal salvadoreño.

“El papa Francisco cree que eso es posible, pero hay tres condiciones: primero, que reconozcamos lo que Romero predicó; que imitemos su ejemplo y que lo invoquemos como santo”, añadió.

El cardenal salvadoreño, que conoció a Romero, estuvo a su lado “en los años más difíciles de su ministerio como obispo”.

Los “años de acoso al pastor”, agregó Rosa Chávez, se debieron a las denuncias que hacía de los asesinatos o “desapariciones” de “sus ovejas” por militares o escuadrones de la muerte de la derecha, entre otras atrocidades.

Pero hoy “están pasando cosas interesantes”, agregó el salvadoreño, “porque hay personas que confiesan que estaban equivocados con monseñor y algunos van hasta su tumba a la catedral a orar y pedir perdón”.

El cardenal percibe “alegría” en su nación con la canonización de Romero que estima ayudará a reconciliar más a los salvadoreños.

La misa de hoy, celebrada en español en el Centro de Convenciones de Anaheim, se enmarcó dentro de las actividades del Congreso de Educación Religiosa 2018, la más grande reunión de católicos en el país, con cerca de 40,000 asistentes, que comenzó el jueves y culminará el domingo.

El congreso finalizará en la tarde del domingo con una liturgia clausura celebrada por el arzobispo de Los Ángeles, José Gómez.

“Vamos a pedirle en oración a monseñor Romero que interceda en el cielo para que se mejore la situación en El Salvador”, declaró Gómez.

“Era un hombre de un gran sentido de buscar la paz, a través del diálogo, para que particularmente los más pobres, los más golpeados, tengan una vida tranquila”, añadió.

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