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Secretario de Defensa autoriza hasta 4,000 tropas de la Guardia Nacional para la frontera con México

U.S. Border Patrol agents patrol along the border fence in Naco, Ariz., in 2012. Defense Secretary James N. Mattis has signed an order that authorizes as many as 4,000 National Guard troops to deploy to the U.S.-Mexico border.
(Ross D. Franklin / Associated Press)
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El Secretario de Defensa James N. Mattis firmó una orden que autoriza a desplegar hasta 4,000 efectivos de la Guardia Nacional en la frontera entre México y Estados Unidos, pero les prohibió interactuar, en la mayoría de los casos, con migrantes detenidos por la Patrulla Fronteriza.

La orden, emitida en respuesta al llamado del presidente Donald Trump de utilizar tropas para detener la inmigración ilegal, especifica que la Guardia Nacional ayudará al Departamento de Seguridad Nacional a lo largo de la frontera en el suroeste, pero no realizará misiones policiales y podrá utilizar armas solo en casos de defensa propia.

“Esta noche las tropas de la Guardia Nacional se están desplegando para apoyar las misiones de seguridad fronteriza a lo largo de la frontera suroeste de Estados Unidos”, dijo el secretario de Seguridad Nacional, Kirstjen Nielsen, en una declaración conjunta el viernes 6 de abril.

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Las tropas estarán bajo control estatal, pero el costo de su despliegue se pagará con cargo al presupuesto del Departamento de Defensa, según la orden, que fue emitida por el Pentágono. No se han detallado los sitios en los que serán desplegados a lo largo de la frontera de 1,954 millas.

La orden no especificaba qué unidades de la Guardia se usarían. Pero funcionarios estatales en Arizona y Texas anunciaron que movilizarían reservistas para la misión fronteriza, y Nevada se ofreció como voluntaria para enviar soldados de la Guardia Nacional para ayudar en la tarea de vigilancia.

Funcionarios de la administración Trump se han apresurado a resolver los detalles de la operación militar desde que Trump anunciara abruptamente el despliegue a comienzos de esta semana, aparentemente frustrado porque el Congreso dirigido por los republicanos se ha negado a financiar completamente su plan para un muro fronterizo. México ha rechazado sus demandas de que pague por el muro.

El Pentágono no ha proporcionado una estimación del costo de la operación militar, y no está claro si los 4,000 miembros de la Guardia autorizados serán movilizados.

Según la ley federal, a las tropas se les prohíbe realizar tareas de aplicación de la ley en la mayoría de las circunstancias, y la orden parece restringirlas a un rol de apoyo a menos que Mattis autorice una misión más amplia.

“El personal de la Guardia Nacional no realizará actividades policiales ni interactuará con migrantes u otras personas detenidas por personal del Departamento de Seguridad Nacional sin su aprobación”, dice la orden redactada para Mattis y firmada por él.

La orden agrega que las tropas llevarán armas solo en “circunstancias que puedan requerir autodefensa”.

No está claro qué operaciones o misiones realizarán a lo largo de la frontera que podrían requerir que lleven armas.

Aunque se les prohibió interactuar con los migrantes, las tropas teóricamente podrían ser parte de las patrullas conjuntas con los oficiales de la Patrulla Fronteriza que podrían conllevar riesgos. Pocos migrantes cruzan la frontera armados, pero algunas patrullas se centran en la interdicción de traficantes de drogas.

La portavoz del Pentágono, Dana W. White, dijo a periodistas el 5 de abril, que los planificadores están buscando enviar unidades de la Guardia Nacional que puedan ayudar con aviación, ingeniería, vigilancia, comunicaciones, mantenimiento de vehículos y apoyo logístico.

El teniente general Kenneth F. McKenzie, Jr., director del Estado Mayor Conjunto del Pentágono, dijo que la preferencia de los militares era que las tropas estuvieran armadas para su autoprotección.

Un estadounidense, de 18 años, fue asesinado por un marine cerca de la frontera con Estados Unidos en 1997, en un incidente que provocó la suspensión temporal de las patrullas de tropas cerca de la frontera.

El general Joseph Lengyel, jefe de la Guardia Nacional del Pentágono, que supervisa las organizaciones de la Guardia Nacional, dijo en Twitter que hasta 500 reservistas se dirigen ahora a la frontera, equipados con vehículos, helicópteros, etc.

La operación parece similar a las ordenadas en los últimos años por los presidentes George W. Bush y Barack Obama. Ambos movilizaron a las tropas de la Guardia Nacional para ayudar a la Patrulla Fronteriza a vigilar partes de la frontera, pero la vigilancia real se dejó a los agentes fronterizos.

A pesar de las repetidas advertencias de Trump sobre la inmigración ilegal desenfrenada, el número de personas detenidas cruzándola ha caído bruscamente en los últimos años y ahora está en su punto más bajo desde 1971, aproximadamente una quinta parte del nivel de finales de 1990, según datos de la Patrulla Fronteriza.

En el año fiscal 2017, aproximadamente 304,000 personas fueron detenidas a lo largo de la frontera entre México y los EE. UU., de acuerdo con los datos de Aduanas y Protección de Fronteras de los EE. UU. Eso es menos de 409,000 en 2016; 331,000 en 2015; 331,000 en 2015, y 479,000 en 2014.

“Trabajando estrechamente con los gobernadores fronterizos, el Departamento de Seguridad Nacional identificó vulnerabilidades de seguridad que podrían ser abordadas por la Guardia Nacional”, dijeron Mattis y Nielsen.

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