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Cómo Paradise Pier, de Disney, la antítesis de Walt, se convirtió en Pixar Pier, de California Adventure

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Lo que alguna vez fue Paradise Pier ahora es Pixar Pier, tomando el tema victoriano de la última remodelación y dándole un cambio de imagen estilo Pixar.

Los primeros días del parque temático Disney’s California Adventure, al lado de Disneyland, se jactaban de una serie de opciones de diseño peculiares: una atracción para la familia con temática de paparazzi, una montaña rusa alusiva a conductores imprudentes en Mulholland Drive y una trama de deportes extremos en su paseo en balsa.

La mayor parte de ello fue reparado o eliminado del parque durante los 17 años. Incorporaciones, como la versión caricaturesca de la Ruta 66 que es Cars Land -posiblemente el área más conceptualmente realizada en todo el Disneyland Resort- así como las mejoras graduales a Grizzly Peak, una tierra que evoca la majestuosidad de los parques nacionales, han transformado con los años al antiguamente difamado California Adventure en un parque temático honorable. Pero una rareza siguió en pie: Paradise Pier.

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El concepto de Paradise Pier siempre fue surrealista: un lugar dentro de un parque temático que evoca el tipo de parque temático que Disneyland quería rechazar. Incluso Disney a veces ha parecido perpleja por su existencia en algunos de sus materiales oficiales.

Escrito en “The Imagineering Field Guide to Disney California Adventure”, la compañía afirma que los muelles tipo carnaval que inspiraron la tierra fueron la “antítesis de lo que Walt [Disney] quería crear con Disneyland”.

Ahora, el segundo intento de reimaginar el muelle se inaugurará el sábado 30 de junio, tomando el tema victoriano de la última remodelación y dándole un cambio de imagen estilo Pixar. La movida agregará más carácter al muelle -ahora dividido en dos áreas, Pixar Pier y Paradise Gardens Park- y, con un golpe publicitario soñado para los ejecutivos, un montón de Incredibles, la familia de superhéroes que actualmente está batiendo récords de taquilla.

La tarea presentada a Walt Disney Imagineering, la rama altamente secreta de la compañía dedicada a las experiencias de los parques temáticos, no fue fácil. Pixar Pier no es el tipo de gran universo que invita a los huéspedes a sumergirse por completo (piense en New Orleans Square, Cars Land y la próxima Star Wars: Galaxy’s Edge).

La tarea presentada a Walt Disney Imagineering, la rama altamente secreta de la compañía, dedicada a las experiencias de los parques temáticos, no fue fácil. Pixar Pier no es el tipo de gran universo que invita a los huéspedes a sumergirse por completo (pensemos en New Orleans Square, Cars Land y el próximo Star Wars: Galaxy’s Edge).

En cambio, en menos de medio año, los diseñadores tuvieron que injertar líneas argumentales en muchas estructuras existentes, del tipo diseñado para evocar los muelles de Santa Mónica y Santa Cruz más que de un universo de Pixar.

Disney siente el cinismo. En el show previo de Incredicoaster, la renovada versión de California Screamin, con tematización de superhéroes, se escucha a la joven Violet Parr comentando sarcásticamente que el apellido ha sido abofeteado con un “viejo paseo”, mientras que la diseñadora de modas Edna Mode señala que todo es en nombre de la sinergia corporativa. El hecho de que sea tan consciente de sí mismo no significa que no pueda ser divertido.

El Incredicoaster es la pieza central del rediseño. Ubicado en la sede y hogar de “The Incredibles”, Municiberg, la historia se centra en la ciudad en honor a los superhéroes al dedicarles una montaña rusa. El bebé Jack-Jack, demasiado bajo para montar la atracción, escapa a la vigilancia de Edna y corre desenfrenado entre las pistas.

La atracción aún pasa de cero a 55 mph en cuatro segundos, y ahora en túneles más alargados y cerrados vemos figuras enormes -una Elastigirl de 53 pies, por ejemplo- acentuadas por la iluminación y efectos digitales. Un momento destacado: ver a Jack-Jack convertirse en una pegajosa sustancia de color psicodélico.

La imagineer Tracey Noce, que fungió como directora creativa de la montaña rusa, insistió en que el paseo presentara figuras tangibles en lugar de simplemente cargarlo con pantallas digitales, una idea bienvenida que no solo disminuye la posibilidad de mareos, sino que reconoce que vamos a lugares como Disneyland para ver creaciones hechas a mano. Debido a que los personajes no se mueven -a pesar de que son realzados por la iluminación y algunos efectos-, un asiento trasero en la montaña hace que la experiencia de visualización sea mejor, para no ver figuras estáticas delante de una curva.

“Uno es el sistema de transporte”, afirmó Noce. “Uno se mueve por él tan rápido”.

Su preferencia fue por la claridad en lugar del caos. Los láseres de Jack-Jack, apuntó, se ilustran con luces limpias y claras en lugar de movimiento frenético. “Los láseres van de un lado a otro, pero eso es gráfico porque te mueves tan rápido”, dijo. “Si tratáramos de pulsarlos, se perdería esa calidad gráfica”.

Los huéspedes, sin embargo, no pasarán demasiado tiempo en Municiberg. Aunque la estética del diseño de Tomorrowland estilo Googie de mediados del siglo pasado, le da una sensación acogedora y retro; el área de los pequeños Incredibles pronto da paso a una sección temática de “Toy Story”, donde Jessie’s Critter Carousel está en construcción y se abrirá en 2019.

“A veces necesitas esos momentos dulces para la familia”, afirmó el imagineer Jeffrey Shaver-Moskowitz. “Esto es algo así. No todo es una tierra inmersiva. A veces solo quieres ver a tus personajes favoritos, y pasar momentos con ellos. No hemos llegado a utilizar ‘The Incredibles’. No hemos usado ‘Inside Out’. No podemos hacer una versión completa de de Municiberg en Cars Land, pero con el Incredicoaster, cuando estás ahí estás inmerso en esa historia. “No tiene que ser del tamaño de la tierra para sumergirte”, dijo. “Podemos hacer eso en una escala más pequeña”.

La mayor parte de los juegos mecánicos del antiguo Paradise Pier, así como Little Mermaid-Ariel’s Undersea Adventure, ahora son Paradise Gardens Park. Pixar Pier es un área similar a un paseo marítimo que se divide en vecindarios, uno dedicado a “The Incredibles”, otro a “Toy Story” y otro todavía en desarrollo con el tema de “Inside Out”.

Pero incluso esto plantea preguntas.

Los personajes de Pixar no viven en un mundo compartido, a pesar de que algunos rincones de internet continúan insistiendo en lo contrario (“No suscribimos a eso”, afirmó Roger Gould, director creativo de parques temáticos de Pixar). Entonces, ¿qué piensa el elenco de “Toy Story”, de que The Incredibles atraviesen el vecindario en una montaña rusa? ¿Y no están las estrellas de “Inside Out” mayormente confinadas a un cerebro humano? ¿Cómo escaparon la Alegría, la Tristeza y la Ira de allí? ¿Y por qué están en un muelle, vendiendo hot dogs picantes?

Los diseñadores de Imagineers y Pixar realmente han estado lidiando con preguntas similares. Después de todo, hay una razón por la cual no hay volantes en los automóviles de los cercanos corredores de Radiator Springs, ya que permitir a los visitantes ‘apoderarse’ de la mente de un automóvil sensible sería grotesco.

“Tenemos cuidado, incluso en una carroza de desfile, de que el Mr. Increíble pueda ver a Mike y Sully (de ‘Monsters, Inc.’), pero no hacer contacto visual”, explicó Gould. “Están viviendo dentro de su propia historia”. Ese es un marco filosófico realmente claro, pero puede volverse muy complicado”.

Una tienda de golosinas, Sweet Stuff de Bing Bong, abrirá más tarde este verano, y en 2019 se añadirá una atracción compacta de “Inside Out”, centrada en la familia dentro de la zona de Incredicoaster.

“En nuestra sede de ‘Inside Out’, eres un trabajador mental”, afirmó Gould. “Así que entras en la mente de Riley. Lo que encontramos en muchas de nuestras historias es que el visitante es algo honorario. En Toy Story Land (que se inaugurará el 30 de junio en Walt Disney World), es un juguete honorario”.

Pero no se requiere gimnasia mental para Lamplight Lounge, el restaurante de dos pisos a la entrada del muelle de Pixar. El lugar reemplaza a Ariel’s Grotto, que actualmente deja a las princesas de Disney sin un restaurante de Disneyland dónde vivir. Con su énfasis en los cócteles y la cerveza artesanal, así como un montón de cócteles sin alcohol, el lugar parece enfocado en los adultos, algo que se hace evidente por el gran bar central del piso inferior y sus asientos adornados, con chimenea.

Irónicamente, cuando California Adventure fue inaugurado, una crítica clave fue que el parque era más para adultos que para niños. Lamplight se siente como un reconocimiento de que el Disneyland Resort es un parque de gente local, que necesita más lugares para que los adultos disfruten un buen tiempo.

Una especie de almacén reconvertido, con rincones de comedor ocultos y un montón de arte original de Pixar, Lamplight es moderadamente aventurero en su exclusivo menú de pub. El menú va desde una hamburguesa artesanal hasta sushi, e incluso hay cuestiones creativas con pieles de papa (más como minipasteles de papa).

La idea, en esencia, es que Lamplight sea el sitio donde los creativos de Pixar van a relajarse. Es de esperar que se trate de un lugar animado y ruidoso, que quizás destaque involuntariamente el tema de esta tierra.

Aunque a primera vista parece que la premisa de Pixar Pier es simplemente Pixar, el paseo marítimo es en gran medida una celebración del juego.

Ya sea que se trate de un joven superhéroe alucinado en una montaña rusa o de juegos a medio camino -o los interactivos de Toy Story Midway Mania-, Pixar Pier es un intento de crear un paseo marítimo más festivo y animado. Los sitios de comida -Angry Dogs de “Inside Out” y Poultry Palace de “Toy Story”, esta última creada para parecerse a una caja gigante de pollo frito- son un poco bobos pero coloridos y de buen gusto para agregar al nuevo tono juvenil del Pier.

Una concha acústica es el hogar de la despreocupada Pixarmonic Orchestra, pero esperamos que este lugar cuente finalmente con miniespectáculos teatrales. Cruzamos los dedos para que haya una actuación callejera romántica inspirada en “WALL-E”, con marionetas de robots. Además, no utilizar “Coco” para una fiesta del Día de Muertos sería un descuido imperdonable.

Teniendo en cuenta que este muelle ha sido sometido a dos revisiones en menos de dos décadas, se trata de una especie de espacio flexible para parques temáticos, y los mundos de Pixar le dan mucho que aprovechar. Si Pixar Pier no es la tierra inmersiva y minuciosamente diseñada que los fanáticos esperan cada vez más, puede ser un espacio en evolución que inspire la interacción con personajes, visitantes, juegos y futuras historias de Pixar.

“Es algo diferente a lo que estamos haciendo”, afirmó Shaver-Moskowitz. “Estamos contando la colección de historias de un estudio en un solo lugar, y estamos ansiosos por las nuevas historias que llegarán, porque hay momentos en los que podremos incorporarlas”.

Los imagineers Shaver-Moskowitz y Noce bromean y dicen que Pixar Pier es como “tapas Pixar”. Y, por supuesto, el éxito a largo plazo de cualquier restaurante de comidas rápidas es la reinvención.

Para leer esta nota en inglés, haga clic aquí.

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