Alarma y más capacitaciones de salud mental por ola de suicidios juveniles en ciudad del sur de California

Ago. 23, 2018 6:58 PM PT

Después de una serie de suicidios en las primeras dos semanas de clases, los distritos escolares de Rancho Cucamonga reenfocaron su atención en los servicios de salud mental y proyectos de prevención.

Cuatro alumnos de escuelas pertenecientes a distritos de Rancho Cucamonga -un niño de 10 años, una chica de 15, otra de 16 y un varón de 16- se suicidaron entre el 6 y el 19 de agosto, informaron los funcionarios.

“No hay mayor tragedia que la muerte de un joven, y desde el comienzo del año escolar, nuestra comunidad del distrito de Chaffey se vio sacudida por la pérdida de tres estudiantes por suicidio”, declaró Mathew Holton, superintendente del distrito escolar de preparatorias Chaffey Joint Union, en un mensaje dirigido a los padres.

A cada escuela se enviaron profesionales de salud mental para ayudar a los estudiantes y al personal en duelo. Un total de 18 terapeutas familiares, 54 consejeros, 27 psicólogos y cinco psicoterapeutas están disponibles para los alumnos en las 12 escuelas del distrito.

Holton envió un correo electrónico a los padres, el 21 de agosto por la noche, en el que resumió lo que el distrito está haciendo en pos de la salud mental y la prevención del suicidio.

El distrito ya cuenta con un grupo de trabajo compuesto por profesionales de salud de cada escuela y miembros de la comunidad, que se reúnen regularmente para expandir y mejorar sus servicios, indicó.

Un nuevo grupo de trabajo comunitario tuvo su primera reunión el martes 21, precisó Holton.

Los funcionarios de la ciudad, la policía y los jefes de bomberos, así como los superintendentes de los distritos escolares del área se reunieron para analizar cómo compartir recursos para satisfacer las necesidades de salud mental de los alumnos y miembros de la comunidad.

Holton también les dijo a los padres que el distrito desarrollará más alianzas con agencias de salud mental en el área y organizará más programas -como asambleas y planes de estudio- con temas que incluyen información sobre suicidio, intimidación, autoestima y el uso apropiado de las redes sociales.

“La salud mental es tan compleja”, afirmó Holton por teléfono. “Como distrito, nos comprometemos a estar atentos a nuestros campus, a vigilar nuestras escuelas y, lo más importante, a ser proactivos en nuestra relación con los estudiantes y los servicios que brindamos para ellos”.

El distrito escolar de Alta Loma, de grados K-8, también participará en el grupo de tareas de la comunidad al que hizo referencia Holton.

“El Distrito Escolar de Alta Loma está profundamente entristecido por la pérdida de uno de nuestros estudiantes”, reconoció el superintendente James Moore en una declaración compartida por correo electrónico.

“El distrito se solidarizó con la familia, los estudiantes y el personal, para proporcionar apoyo y recursos durante este momento difícil. Continuaremos brindando sistemas de apoyo de varios niveles para todos nuestros estudiantes, durante todo el año”, indicó.

El distrito no respondió más preguntas.

Los expertos en salud mental expresaron su preocupación sobre el “contagio de suicidios”, un fenómeno que influencia a las personas para intentar quitarse la vida después de enterarse de casos ocurridos, en las noticias o en sus comunidades.

Después de la muerte del actor Robin Williams, en 2014, las tasas de suicidio en el país aumentaron en un 10%, según un estudio publicado en la revista PLOS One, en febrero. Y después del fallecimiento de Marilyn Monroe, en 1962, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) descubrieron que las tasas de suicidio habían ascendido un 12% en comparación con el año anterior.

Cuando el famoso chef y autor Anthony Bourdain se suicidó este 2018, días después de que el ícono de la moda Kate Spade también se quitara la vida, Madelyn Gould, profesora de epidemiología en psiquiatría infantil en la Universidad de Columbia, afirmó: “Estaba triste por él y por todas las personas que se enterarán de ello, y también estoy triste por quienes podrían verse influenciados por el hecho”.

Los padres de Rancho Cucamonga se mostraron afligidos y discutieron sus preocupaciones compartidas de que las redes sociales y los teléfonos aíslan a los niños, haciéndolos más susceptibles a la intimidación y posiblemente, incluso, alentándolos a participar en conductas peligrosas.

El “Desafío Momo” fue un tema de consternación en el grupo de noticias de Rancho Cucamonga, en Facebook. En WhatsApp y a través de otras herramientas de mensajería, las personas pueden enviar mensajes de texto a la cuenta -cuyo avatar es una escultura de una mujer con características perturbadoras y exageradas- y ésta responde con comentarios amenazantes y denigrantes.

El diario Buenos Aires Times informó que la muerte de una niña de 12 años en Argentina podría estar relacionada con el juego.

Holton remarcó que está al tanto del juego y que los padres y el personal deberían vigilar estos fenómenos en línea, así como los programas de televisión relacionados con el suicidio, como “13 Reasons Why”, de Netflix, aunque negó severamente que el Desafío Momo tenga que ver con los recientes suicidios.

Un portavoz del Departamento de Policía de Fontana, que respondió a la muerte de uno de los estudiantes en su residencia, afirmó que el hecho “no estaba para nada relacionado con eso”. Los suicidios no parecen estar conectados entre sí, y los estudiantes no se conocían entre sí, según el Departamento del Sheriff del Condado de San Bernardino.

Howard Adelman, codirector del Proyecto de Salud Mental Escolar de UCLA, destacó que los grandes distritos escolares pueden tener dificultades para observar el efecto de sus servicios de salud mental y prevención del suicidio a gran escala.

“Hay una diferencia entre algo que a uno le gustaría que ocurra en todo el sistema, y realmente lograrlo a escala en todas las escuelas de un gran distrito”, explicó.

Debido a los recursos limitados, las medidas adoptadas por las escuelas para mejorar la salud mental a menudo son “fragmentadas y poco sistemáticas”, dijo.

Adelman alienta un enfoque más proactivo y amplio para la salud mental a ese nivel.

Las escuelas deben promover el desarrollo emocional y social positivo, así como responder a situaciones de crisis como la que enfrentan ahora en Rancho Cucamonga, afirmó. “La solución no es solo agregar más organismos, sino dar un paso atrás y observar esto desde la perspectiva del sistema”, remarcó.

Se espera que el gobernador Jerry Brown firme una legislación para exigir que las escuelas públicas impriman el número de teléfono de la Línea Nacional de Prevención del Suicidio (National Suicide Prevention Lifeline) en las tarjetas de identificación de los estudiantes entre séptimo y doceavo grado.

El proyecto de ley 972 del Senado, creado por el senador Anthony Portantino (D-La Cañada Flintridge) fue aprobado en ambas cámaras y, de promulgarse, se implementará a partir de julio de 2019.

Holton destacó que, desde las muertes, el cuerpo estudiantil se ha unido. Los alumnos de preparatorias de todo el distrito vistieron de rojo en honor a sus compañeros, y ha habido una serie de actividades para mostrar apoyo desde que se informaron los sucesos.

En Twitter, los estudiantes mostraron su aflicción y publicaron su apoyo a amigos y familiares de un alumno de Etiwanda High School, al parecer uno de los fallecidos.

“Lo más difícil... es realmente asegurarnos de que estamos ahí para los estudiantes; que sepan que pueden comunicarse y sentir que tienen a alguien que los escuchará, que se preocupa por ellos”, aseveró Holton. “Estamos todos juntos en esto”.

Si usted o un ser querido está considerando suicidarse, llame a la Línea Nacional de Prevención del Suicidio: 1-800-273-TALK (8255).

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