Mujer prepara sus Doritos con queso en una gasolinera y ahora lucha por su vida
Lavinia Kelly solo se detuvo por una botana en una gasolinera, pero al parecer el queso y los Doritos que consumió, no fueron la mejor combinación.
Una mujer del condado de Sacramento, en California, que preparó sus Doritos con queso de un dispensador en una gasolinera, ha estado hospitalizada por casi un mes después de contraer botulismo, una enfermedad grave causada por bacterias que pueden causar parálisis, dificultad para respirar y, potencialmente, la muerte.
Lavinia Kelly está tan enferma que no puede hablar ni respirar por su cuenta; ella pasó su cumpleaños (33) esta semana en una unidad de cuidados intensivos, informó el periódico Sacramento Bee.
Ahora, los funcionarios de salud del condado dicen que Kelly es una de al menos cinco personas enfermas de un brote de botulismo que ha estado relacionado con el queso en el establecimiento de Valley Oak Food and Fuel, en el suburbio de Sacramento en Walnut Grove.
Las cinco personas que han confirmado la enfermedad han sido hospitalizadas, dijo, en un comunicado, el Departamento de Salud y Servicios Humanos del condado de Sacramento. Hasta el momento, los funcionarios de salud están investigando otros tres casos probables y otro caso del que se sospecha, según el periódico local.
Los funcionarios del condado suspendieron la venta de alimentos preparados en Valley Oak Food and Fuel el 5 de mayo, según el departamento de salud.
El martes, la familia de Kelly presentó una demanda civil contra Valley Oak Food and Fuel, alegando negligencia, responsabilidad estricta por el producto, e incumplimiento de la garantía implícita, según muestran los registros del Tribunal Superior del condado de Sacramento.
Kelly, una madre de tres hijos, se dirigía a casa del trabajo el 21 de abril cuando se detuvo en la gasolinera para comprar una botana. A las pocas horas de comer la salsa de queso, se sentía cansada, dijo al diario, el marido de Kelly, Ricky Torres.
Al día siguiente, Kelly veía doble y no podía caminar bien, según los registros de la corte. Ella fue a Sutter Medical Center, donde se encuentra actualmente, pero fue enviada de regreso a casa.
Para el 23 de abril, Kelly apenas podía respirar y tenía problemas para hablar, según documentos de la corte. Torres la llevó de regreso al Centro Médico Sutter, donde los médicos la pusieron en observación y permaneció en una sala de cuidados intensivos.
Hasta ahora, ella no puede abrir los ojos, así que cuando quiera ver quién ha entrado a su habitación del hospital, los miembros de la familia le tienen que levantar sus párpados y en ocasiones usan cinta adhesiva para mantenérselos abiertos, dijo Torres al periódico.
“Simplemente no entendemos por qué esto sucedió con una bolsa de papas fritas y queso”, dijo Torres. “¿De Verdad? ¿Cómo sucede esto?
Según la demanda, el pronóstico de Kelly es incierto.
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