Anuncio

Las actualizaciones de temas como la islamofobia y la educación sexual provocan acalorados debates distritales

Share

Las discusiones sobre una política contra la intimidación y un currículo de educación sexual generaron una encendida una reunión este martes en la Junta del Distrito Escolar Unificado de San Diego.

Ninguno de los dos temas serían sometidos a una votación significativa ante la Junta, pero ambos han sido controvertidos entre algunas familias del distrito. Los consejeros votaron para ampliar el programa de bienestar del distrito, que incluye educación física, nutrición, ambiente de escuela segura, y bienestar social y emocional.

El programa también incluye un currículo de educación sexual que, según algunos padres de familia dicen, es inapropiado para los menores y contiene material pornográfico. Más de 2,000 personas han firmado una petición pidiendo que el plan de estudio sea suspendido. Varias personas entre los presentes hablaron a favor del currículo de educación sexual, alegando que es inclusivo y que reconoce a las personas de diferentes orientaciones sexuales. Otros, sin embargo, tuvieron serios problemas con éste y sostuvieron minimiza la abstinencia, es misógino y pornográfico.

Anuncio

Un maestro que ha enseñado el currículo expuso que sí incluye la abstinencia como un componente principal y que no tiene pornografía. Los miembros del personal del distrito señalaron que algunos de los materiales a los que se referían las personas eran de recursos adicionales en línea y no son parte del currículo, y al menos un sitio web en cuestión fue retirado de la lista de recursos.

Los consejeros también votaron por asociarse con la Liga Antidifamación para ampliar su iniciativa “Sin lugar para el odio” y formar un comité intercultural con los miembros de varias religiones y culturas, que ayude a crear ambientes escolares que protejan a todos los estudiantes contra la intimidación.

En abril, la junta votó sobre una política contra la intimidación que se centró en la protección de los estudiantes musulmanes, lo cual llevó a quejas de que favoritismo de una religión sobre otra. Algunos equipararon la acción del distrito a la observancia de la ley Sharia, las reglas de la fe islámica.

Un grupo de padres representados por el Freedom of Conscience Defense Fund demandó al distrito, alegando que la política viola la ley constitucional al señalar a los estudiantes musulmanes para su protección.

Desde abril, los síndicos y miembros del personal del distrito han dicho que la dicha política había sido malinterpretada, ya que era parte de una misión más amplia para proteger a los estudiantes de todas las religiones.

Aún así, el distrito también tomó medidas para abordar algunas de las preocupaciones planteadas. El director de District Family and Community Engagement, Stan Anjan, señaló en abril que las festividades musulmanas serían añadidas a los calendarios escolares para ayudar a los maestros y directores a programar eventos extraescolares que no entren en conflicto con las celebraciones islámicas de las que ahora podrían tener conocimiento.

El martes por la noche, una presentación ante la Junta señaló que las principales festividades de todas las religiones se incluirían en los calendarios.

Otro cambio abordó la demanda sobre la labor del distrito con el Consejo de Relaciones Islámico-Estadounidenses (CAIR, por sus siglas en inglés). Algunos miembros de CAIR han sido asociados con el terrorismo, pero la amplia organización señaló que esas pocas ‘manzanas podridas’ no deberían manchar la reputación de todo el grupo.

El martes se detalló que el personal sería redirigido de formar una asociación formal con CAIR a un comité intercultural con varias religiones. Ese cambio por sí solo demostró ser polémico, y varias personas se presentaron ante la Junta para argumentar que CAIR es un recurso valioso para el distrito. Otros también dijeron que el distrito no debería apartarse de su voto anterior para ayudar a los estudiantes musulmanes, que están sujetos a acoso y hostigamiento a un nivel superior que otros estudiantes.

Entre esos oradores se encontraba Hanif Mohebi, director ejecutivo de la oficina de CAIR en San Diego, quien expresó que su organización quiere seguir trabajando con el distrito y siempre apoyó la creación de un ambiente positivo para los estudiantes de todas las religiones. “Nunca hemos salido a decir que sólo debe tratarse de un grupo, pero creo que también debemos darnos cuenta de que puede ser un error no centrarse en aquellos que son señalados mucho más que el resto”, manifestó. “Dicho esto, esperamos que el distrito admita y reconozca públicamente el trabajo que hemos hecho durante más de una década con ellos, y también esperamos que se comprometa a trabajar con nosotros y con todas las demás partes responsables para beneficiar a todos los estudiantes”.

Más tarde, Mohebi afirmó que CAIR estaría dispuesta a trabajar con el nuevo comité intercultural.

Los miembros de la Junta apoyaron al comité intercultural, pero algunos también señalaron que la atención especial a los estudiantes musulmanes está justificada. “Uno de los temas que muy claramente necesita ser abordado hoy es la discriminación, el acoso y difamación de la comunidad musulmana en nuestra comunidad”, expuso el consejero John Lee Evans.

El presidente de la Junta, Richard Barrera, afirmó que ha habido malentendidos importantes sobre lo que el distrito ha hecho para proteger a los estudiantes musulmanes; lo cual condujo a una confrontación verbal entre las personas en el auditorio. “Esto no se trataba de promover una religión”, aseguró. “Nunca lo fue. “No se trataba, en absoluto, de promover la ley Sharia”.

Algunas personas entre el público discreparon verbalmente, y un hombre comenzó a gritarle a Barrera comentarios como: “Obedece la Ley”, “Se trata de una política izquierdista”, “Eres Anarquista” y “Honra la Constitución”.

El presidente de la Junta aseguró que el arrebato fue un ejemplo de lo que los estudiantes musulmanes viven todos los días. “Si nosotros escuchamos esto como junta escolar, sabemos que nuestros hijos escuchan cosas mucho peores”, dijo. “Algunos pueden gritar y expresar odio, pero nosotros vamos a dar un paso al frente como una comunidad unificada para defender a nuestros estudiantes”.

Traducción: Diana Cervantes

Para leer este artículo en inglés, haga clic aquí

Anuncio