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En 15 años, los robots podrían reemplazar un 38% de los empleos del país

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Más de un tercio de los empleos estadounidenses podrían estar “en alto riesgo” de automatización a comienzos de la década de 2030, un porcentaje mayor que los de Gran Bretaña, Alemania y Japón, según un informe publicado el pasado viernes por la firma de contabilidad y consultoría PwC.

El análisis enfatizó que sus estimaciones se basan en las capacidades anticipadas de la robótica y la inteligencia artificial (AI, por sus siglas en inglés), aunque el ritmo y la dirección del progreso tecnológico son “inciertos”. También señaló que, en los EE.UU., un 38% de los trabajos podrían estar en riesgo de automatización, frente al 30% en Gran Bretaña, el 35% en Alemania y el 21% en Japón.

La razón central de ello no es que los EE.UU. tienen más empleos en sectores maduros a nivel universal para la automatización, sino que cada vez más trabajos en ciertos sectores se vuelven más vulnerables en comparación con los mismos puestos en otros países. Por ejemplo, explica el informe, el sector financiero y de seguros tiene una posibilidad mucho mayor de automatización en los EE.UU. que en Gran Bretaña. Eso se debe a que los trabajadores financieros estadounidenses son menos educados que sus pares británicos. Mientras que los empleados del sector financiero en Londres trabajan en mercados internacionales, sus contrapartes estadounidenses se centran más en el mercado minorista nacional y “no necesitan tener los mismos niveles educativos”, resalta el análisis. Los trabajos que requieren menos educación se encuentran en un mayor riesgo de automatización.

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Otras industrias que podrían estar en alto riesgo incluyen la hospitalidad y los servicios de comida, así como el transporte y almacenamiento.

Los analistas expresaron que la conducción de camiones será probablemente la primera actividad totalmente automatizada en los EE.UU., ya que los grandes vehículos se desplazan primordialmente por autopistas, los caminos más sencillos para recorrer sin intervención humana.

Pero los robots no necesariamente reemplazarán a tantos trabajadores humanos. El informe destaca varios obstáculos económicos, legales y regulatorios que podrían impedir la automatización, incluso en puestos de trabajo donde ésta sería tecnológicamente factible. Por un lado, el costo de los robots -incluyendo el mantenimiento y las reparaciones- podría aún ser demasiado costoso en comparación con los trabajadores humanos. Y, en el caso de vehículos autodirigidos, quedan dudas sobre quién sería responsable en caso de un accidente.

En otras palabras, mover robots fuera de un entorno controlado “es todavía un gran paso”, afirmó John Hawksworth, economista jefe de PwC en Gran Bretaña.

El secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, manifestó el pasado viernes que no le preocupa que la inteligencia artificial reemplace los empleos estadounidenses. “Creo que estamos tan lejos de eso que ni siquiera lo tengo en mi radar”, afirmó para Axios Media. “Estimo que faltan 50 o 100 años aún”.

El funcionario también expresó que la automatización permitirá a los trabajadores humanos hacer tareas más productivas, con salarios más altos. “Ha tomado empleos que son de bajo costo”, resaltó. “Necesitamos asegurarnos de invertir en educación y entrenamiento para los trabajadores del país”.

La automatización podría crear también algunos empleos, resaltó el informe de PwC. Una mayor productividad robótica podría aumentar los ingresos de quienes trabajan en la nueva tecnología, lo cual, según Hawksworth, fluiría hacia la economía más amplia. Los sectores que son más difíciles de automatizar, como el cuidado de la salud, también podrían ver un incremento de empleos, destacó.

Traducción: Valeria Agis

Para leer esta historia en inglés haga clic aquí

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