Exjefe de bomberos demanda y denuncia corrupción entre los inspectores de la ciudad

Un alto funcionario del Departamento de Bomberos de Los Ángeles (LAFD) denunció hechos de corrupción en los programas de inspección de la ciudad que alguna vez administró, como parte de una demanda por represalias que alcanza los $5 millones, presentada este martes.

El jefe adjunto John Vidovich fue removido de su cargo como jefe de bomberos el mes pasado, luego de un mandato de dos años que se vio afectado por las revelaciones sobre la demora de las inspecciones y las crecientes críticas del gremio de bomberos.

En su demanda, Vidovich afirmó que fue expulsado luego de exponer los esquemas de fraude, extorsión y horas extras entre las unidades del LAFD encargadas de hacer cumplir los códigos de seguridad contra incendios para edificios de departamentos, escuelas, hospitales, rodajes de películas y otros.

El exfuncionario señaló a un grupo de inspectores sénior que dijeron en mayo pasado, bajo su mandato, que la oficina puso en riesgo al público al exigir un recorte de presupuesto destinado en las revisiones de seguridad, en una frenética iniciativa para despejar la masiva acumulación de edificios sin inspeccionar. Vidovich negó esas acusaciones y afirmó que, cuando asumió el cargo de jefe de bomberos, en 2014, el programa de inspección era “un desorden”, y que esos inspectores eran responsables de gran parte del caos.

También los acusó de falsificar documentos, de ralentizar el trabajo y de manipular una base de datos del departamento para prevenir la inspección de instalaciones vulnerables, como el hospital Veterans Administrarion, cerca de Westwood.

Los voceros del alcalde Eric Garcetti y del LAFD declinaron hacer comentarios sobre las acusaciones. Los abogados de los inspectores a quienes Vidovich acusó por irregularidades no pudieron ser contactados para emitir una declaración.

El mes pasado, el jefe de bomberos Ralph M. Terrazas reasignó a Vidovich a un nuevo puesto como asesor de Garcetti. Los asesores del alcalde señalaron que su intención era emplear los 35 años de experiencia del exjefe en el LAFD para complementar una unidad que agilice los nuevos proyectos de construcción.

Vidovich aseguró que la posición era inexistente y que su salud fue resultado de un complot de la oficina del alcalde para derrocarlo en pos de un respaldo del gremio de los bomberos en el próximo intento de reelección de Garcetti. La resultante humillación pública “ha afectado adversamente su salud y bienestar personal”, según la demanda, que busca $5 millones por daños, así como gastos legales y otros costos.

El sindicato que representa a los inspectores y otros bomberos votó, a comienzos de este año, por aprobar una resolución de “no confianza” en Vidovich. Antes de que el departamento, de 3,100 bomberos, decidiera reemplazarlo, el gremio, un jugador muy poderoso en el Ayuntamiento, se preparó para presionar al alcalde y otros funcionarios e instar a su remoción.

En una entrevista, el mes pasado, el presidente del gremio, el capitán Frank Lima, elogió la medida, pero negó que haya jugado algún papel en el respaldo que su grupo concedió al alcalde. En 2013, cuando Garcetti llegó al cargo, el gremio apoyó a su oponente, por entonces la controladora de la ciudad, Wendy Greuel. Lima no estuvo disponible para hacer comentarios para este artículo durante el martes.

Vidovich, cuya compensación total fue de casi $236,000 en el último año fiscal, anteriormente fue el jefe de personal de la agencia. Su la ciudad no llega a un acuerdo, Vidovich está preparado para iniciar un juicio, advirtió su abogado.

Su caso se suma a una larga lista de conflictos en el LAFD que acabaron en pleitos, lo cual resultó en millones de dólares en acuerdos y veredictos durante las últimas décadas.

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Traducción: Valeria Agis