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Pelean el Madison Square Garden y el T-Mobile Arena para ser sede del Canelo vs. Golovkin II

(Ethan Miller / Getty Images)
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La lucha para ser sede de la pelea de desempate del duelo del 5 de mayo entre Canelo Álvarez y Gennady Golovkin se ha convertido en un enfrentamiento entre el glamur de Las Vegas y la elegancia clásica de la Gran Manzana.

La pelea, que fue formalmente anunciada el martes, será decidida por el dinero y una gran dosis de política. Por lo pronto, la guerra por ser la arena anfitriona del combate ha comenzado.

“El Garden es sinónimo de las peleas más grandes y los mejores eventos en los deportes y el duelo de Golovkin-Álvarez ciertamente encaja en esa categoría”, dijo Joel Fisher, vicepresidente ejecutivo del Madison Square Garden, que ha sido anfitrión de magnos eventos como el Muhammad Ali-Joe Frazier I y los Grammys.

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El promotor de Álvarez, Óscar de la Hoya, dijo en el lanzamiento de la primera contienda por el título de peso mediano que pronosticaba una trilogía que llevaría a los dos boxeadores por toda la nación, desde Las Vegas a las luces de Nueva York, y hasta el estadio masivo de Jerry Jones: el AT&T Stadium a las afueras de Dallas.

A diferencia de Golovkin, quien ha logrado catapultar su popularidad en Estados Unidos al ganar cinco contiendas en el MSG desde 2013, Álvarez, 27, nunca ha peleado ahí.

Nueve de las 12 peleas han sido en Las Vegas, donde abrió el T-Mobile Arena hace dos años en un fin de semana del Cinco de Mayo al noquear a Amir Khan, de Inglaterra.

Álvarez es la gran atracción, por lo que asegura que sus deseos de la sede tendrán más peso en la decisión.

El AT&T Stadium no está disponible en este tiempo porque será sede del draft de la NFL del 26 al 28 de abril. El promotor de Golovkin, Tom Loeffler, dijo esta semana que MSG envió su propuesta y que era más lucrativa que el paquete que ofreció el T-Mobile Arena en septiembre.

La pelea generó ganancias en las entradas de más de $27 millones, con más de 17,000 boletos vendidos, y se colocó como la tercera pelea con mayor venta de boletos detrás de las peleas de Floyd Mayweather ante Manny Pacquiao y Conor McGregor, con casi $80 millones en ganancias totales una vez que se contó también el Pago por Evento.

Esta pelea de desempate se espera que sea más lucrativa debido a lo cerrado de la primera pelea y el hecho que los aficionados no habrán invertido tanto dinero en el boxeo como lo fue en la primera pelea, cuando tres semanas antes habían peleado Mayweather y McGregor.

Pero a pesar de que Nueva York podría producir más ventas de boletos, Las Vegas tiene varias ventajas.

Los peleadores evitarán impuestos estatales de la bolsa que ganen en Nevada. Los hoteles son más baratos para la cantidad de gente que acompaña a los peleadores y también hay mucho más gimnasios disponibles durante la semana de la pelea. También hay acceso fácil a la arena y las sedes de las conferencias de prensa y el pesaje antes de las contiendas.

La presencia de apostadores también permite al T-Mobile Arena y sus dueños MGM y AEG poder ofrecer una cifra superior al MSG.

Sin embargo, el punto más importante para el Garden es que le provee a Golovkin más tranquilidad después de salir decepcionado por los jueces que se utilizaron por la Comisión Atlética de Nevada en el primer compromiso.

El veterano juez de Las Vegas, Dave Moretti, anotó la pelea 115-113 a favor de Golovkin, Don Trella fue el único juez en darle el séptimo round a Álvarez y lo apuntó 114-114, mientras que la juez de Las Vegas, Adalaide Byrd, entregó una tarjeta sumamente dispareja de 118-110 (10 rounds a 2) a favor de Álvarez.

Desde ese entonces, Byrd no ha tenido tanto trabajo y tampoco le han dado asignaciones con títulos de por medio y el director ejecutivo de la comisión, Bob Bennett, se ha asegurado que Byrd y Trella no serán utilizados en la revancha.

Algunos récords obtenidos por Los Angeles Times el año pasado revelan que Loeffler aprobó la selección de Byrd, Trella y Moretti antes de la primera pelea.

Trella, irónicamente, dio a Golovkin el triunfo de 115-112 en su victoria en marzo de 2017 ante Daniel Jacobs.

Esta vez, Loeffler está presionando para que solamente se utilice un juez de Nevada y otros dos sean de otras áreas de Estados Unidos.

Al hablar de la selección de los jueces, Bennett dijo que está dispuesto a considerar las opiniones de los promotores durante el proceso, asegurándose que la recomendación de la comisión sea para el mejor interés del deporte.

“Sentimos que podemos acomodar lo que están pidiendo, le podemos dar jueces A para la pelea”, dijo Bennett. “Yo me encargaré de todas las dudas y preguntas sobre los jueces. Esta es la pelea más grande. Voy a encontrar a los mejores jueces que pueda encontrar en Estados Unidos”.

La decisión de la sede será hecha a medianos de febrero.

“Sabíamos que esta pelea iba a estar muy pedida”, dijo De la Hoya en una declaración preparada por su publicista. “Estamos agarrando muchos textos, correos electrónicos y peticiones de boletos, como nunca hemos obtenido antes. Ni en mis peleas había tenido tanta respuesta”.

“Ahora tenemos que encontrar un lugar para poder vender todos esos boletos”.

For the original story in English, please click here.

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