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Los Clippers quitan el pie del acelerador en lo que podría ser el último viaje juntos a playoffs

Los Angeles Clippers forward Blake Griffin during the second half of an NBA basketball game against the Los Angeles Lakers, Saturday, April 1, 2017, in Los Angeles. (AP Photo/Ryan Kang)
(Ryan Kang / AP)
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Este siempre ha sido el mejor momento del año para los Clippers, estos primeros días de abril, estos momentos de promesa infinita antes que los playoffs los devuelvan a la realidad.

¡Los Clippers son tremendos! ¡Son peligrosos! ¡Van a sorprender!

Esta primavera ha sido diferente. Se pudo sentir en el Staples Center el pasado sábado cuando eran los anfitriones contra los Lakers. Se sentía en la afición cohibida y en la frustración de los jugadores.

Los Clippers están desconectados, sin espíritu y volverán a fallar en los playoffs.

Los Clippers ganaron ese partido por 11 puntos, pero era porque jugaron un equipo alterno, fácilmente hubieran ganado por un marcador tres veces más abultado.

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Los titulares que mandó Doc Rivers a la duela fueron dominados por una alineación compuesta por Brandon Ingram, David Nwaba, Tyler Ennis, Tarik Black y Thomas Robinson. Los Clippers fueron presionados, rebasados, superados y casi pierden el juego de no ser que D’Angelo Russell y Jordan Clarkson provinieron de la banca para devolver a los Lakers al derrumbe.

“Quitamos el pie del acelerador, es algo desconcertante para mí, preocupa un poco”, dijo Blake Griffin después del partido. “Tenemos que descifrarlo, tenemos que mejorar”.

Los Clippers ganaron pero estas últimas semanas se han sentido como una pérdida, se siente como si estuvieran poco a poco rompiéndose.

Desde que empezaron la temporada 14-2, su porcentaje de partidos ganados nunca subió. A estas alturas ya no se siente la emoción y es casi un sentimiento de tristeza como si al gritar por ellos es como si les estuviéramos diciendo adiós a un viejo amigo.

En este verano, Chris Paul y Griffin pueden optar por no seguir con sus contratos y convertirse en agentes libres, mientras que J.J. Redick será un agente libre. Un núcleo de un grupo que durante los últimos seis años han elevado el nombre de los Clippers y que posiblemente podrían ser separados.

Si ellos logran llegar a las finales de conferencia por primera vez, sería difícil imaginar a Paul y Griffin juntos nuevamente uniéndose para intentarlo otra vez. La próxima temporada podríamos ver un equipo totalmente diferente que pondría a prueba la fe de los nuevos aficionados y la paciencia de sus precios en las entradas.

Entonces una buena presentación de los Clippers en los playoffs sería requerida para evitar que esos jugadores desaparezcan, pero después de aquel juego ante los Lakers, se siente como si esas esperanzas empiezan lentamente a diluirse. De la manera como están jugando, con suerte terminarían con el Jazz de Utah en la primera ronda.

“Esperamos ser lo suficientemente buenos, algunas personas no creen, para ser honestos”, dijo Rivers. “Esta en nosotros demostrarlo pero no podemos hacerlo hasta que empiecen los playoffs”.

Han probado lo contrario en las semanas recientes, en aquel partido ante los Mavericks de Dallas en el que cayeron al final del juego, además de aquella ventaja de 18 puntos ante los Kings de Sacramento que fue remontada y un último cuarto para el olvido ante los Suns de Phoenix.

…Y contra Lakers, ni se diga, 17 balones perdidos y dos rebotes menos que sus rivales. En el cuarto período fueron superados por 10 unidades con unos Lakers que parecen jugar con una banderita blanca todo el tiempo.

“Jugamos dos buenos cuartos… dos buenos cuartos… tienen que ser tres y cuatro”, dijo Griffin. “Tenemos que completar un buen partido, eso es lo que tenemos que hacer. No puedes ganar partidos en los playoffs sin consistencia, tenemos que hacer las cosas mejor”.

A Rivers se le preguntó si él podía ver lo que estaba sucediendo en el tramo final de los partidos. Para la sorpresa de todos, Rivers no pudo dar una respuesta completa.

“Sí, yo puedo”, dijo. “No voy a hablar de eso pero lo puedo ver claramente”.

Cualquiera que los ha visto lidiar con esa lucha en los grandes momentos en sus seis primaveras previas, lo puede ver también y los siento Doc, pero todos hablan de eso. Por cualquier razón, Paul, Griffin y DeAndre Jordan no siempre parecen que engranan juntos durante esos momentos grandes. Hay una continuidad que hace falta, no hay confianza. Hay un gran vacío en “Los Tres Grandes”, quizás tanto como para separarlos y eso sería una lástima. Justo cuando los Clippers están estableciendo sus raíces, podrían pronto ser arado.

Temprano en el juego del sábado, Griffin se convirtió en el primer jugador en alcanzar 10,000 puntos vistiendo la camiseta de los Clippers. Es algo para ser considerado como una legacía. Le pregunté si él quería ser un jugador de los Clippers toda su vida. Él no quiso hablar de eso.

“He estado muy feliz en este tiempo aquí, absolutamente, pero estoy enfocado ahora en esta temporada”, dijo Griffin. “No quiero hablar de la agencia libre, no he pensado acerca de eso y no quiero hacerlo ahora”.

Claro que él no lo sabe. Cuando se trata del futuro inmediato de los Clippers, nadie sabe nada. Pero después de cinco años esperando por lo mejor, muchos esperan lo peor.

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