Sean Penn teme por su vida tras el documental de Kate del Castillo sobre ‘El Chapo’

El controvertido “triángulo” dramático de la vida real que rodea la relación entre la actriz mexicana Kate del Castillo, el actor estadounidense Sean Penn y el narcotraficante mexicano Joaquín “Chapo” Guzmán tomó este fin de semana un carácter todavía más intenso luego de las declaraciones hechas por dos de sus protagonistas.

Como informamos previamente a través de este medio, en “The Day I Met El Chapo: The Kate del Castillo Story”, la serie documental de Netflix que se encuentra ya en ‘streaming’ dentro de ese canal de paga, Del Castillo confiesa haber tenido relaciones sexuales con Penn; pero ayer, durante su participación en el programa “Good Morning America”, aseguró que no lo hizo porque se hubiera enamorado de él, sino porque ambos son adultos y el asunto fue un tema “de negocios”.

Hasta ahí, todo suena comprensible, pese a que, como la mexicana dijo en ese espacio, todos esperaban que ella hubiera tenido sexo no con Penn, sino con “El Chapo”, debido a las numerosos mensajes cariñosos que intercambió con este. Pero eso no quiere decir que lo dicho ahora por la intérprete luzca necesariamente como el recuento de un acto honesto, sobre todo porque insinúa que hasta esas relaciones estuvieron vinculadas al dinero.

Sea como sea, si esto sucedió, y en vista de que ambos no tienen parejas conocidas o estables, el asunto no tendría que tener mayores consecuencias, ni siquiera morales; el problema en realidad es el que se ha revelado hace unas horas con el lanzamiento del documental y las acciones tomadas por Penn, quien según el New York Times, hizo que sus abogados enviaran una carta a los ejecutivos de Netflix para prevenir el estreno de la serie, porque, de otro modo, “tendrán sangre en sus manos en el caso de que la producción cause daño físico”.

Todo parece indicar que el actor se encuentra sumamente disgustado porque cree que el documentario señala que él fue quien ayudó a las autoridades del Departamento de Justicia a dar con el paradero de “El Chapo”, una teoría que algunos plantearon desde el principio por el simple hecho de que sabía dónde se encontraba el esquivo narcotraficante y lo había incluso conocido en persona en el mismo refugio.

Para ser más claros, “El Chapo”, que se había burlado efectivamente hasta ese momento de los esfuerzos de sus perseguidores, fue capturado al día siguiente de que la revista Rolling Stone publicara con bombos y platillos un artículo del mismo actor basado en sus experiencias con el capo de las drogas. Eso no lo vuelve culpable, claro, porque pudo tratarse de una coincidencia o, con mayor probabilidad, podría haber sido el resultado de que el mismo actor hubiera sido espiado por las autoridades, con lo que la responsabilidad mayor recaería en “El Chapo” por sus irrazonables deseos de fama cinematográfica en medio de la clandestinidad.

Por su lado, Netflix se ha lavado las manos lanzando un comunicado en el que dice que le brindó muchas veces a Penn la oportunidad de participar en “The Day I Met El Chapo”, pero que este se negó. “Los sucesos alrededor de ese encuentro han sido todos cubiertos, incluso por Penn en la Rolling Stone y sus numerosos comentarios desde entonces. El único terreno nuevo en el que estamos entrando con esta serie es el de darle a Kate la oportunidad de dar finalmente su versión acerca de esta historia más rara que la ficción”, enfatiza el informe.

Lo cierto es que, haya hecho lo que haya hecho, Penn teme claramente por su vida, y que lo que pase en adelante con su carrera no podrá estar desvinculado de este escándalo. Por el momento, la que parece haber salido mejor parada del mismo es Del Castillo; pero habrá que ver lo que sucede en el futuro inmediato con todo este embrollo. Y tú, amigo lector, ¿has visto ya el documental? ¿Quién crees que está diciendo la verdad?