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Natti Natasha te lleva a su cuarto con la ayuda de Bad Bunny y de sus atributos corporales

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Ya lo hizo con Ozuna, y ahora le toca hacerlo con otra estrella del género urbano, Bad Bunny. Nos referimos, claro está, a las colaboraciones musicales logradas por la dominicana Natti Natasha, quien tras el descomunal éxito del primer proyecto, “Criminal” (cuyo video cuenta actualmente con más de 998 millones de visitas en YouTube -en serio-), regresa este fin de semana con una propuesta que promete también “romperla”.

Estamos muy conscientes de haber publicado hace unas horas otra nota acerca de Bad Bunny, pero esa se refería al lanzamiento de “El baño”, el nuevo sencillo y clip de Enrique Iglesias en el que, como lo comentamos también, participa de manera muy breve; en este caso, el nuevo astro boricua se hace mucho más presente tanto en el plano de la “actuación” como en el del “canto” (nuestras comillas son justificadas).

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Claro que la auténtica estrella por aquí es Natti Natasha, y no necesariamente por sus talentos artísticos (aunque todo parece indicar que puede vocalizar al menos mejor que su acompañante de ocasión), sino por su absoluta falta de prejuicios para mostrarse constantemente en prendas íntimas de lo más atrevidas con el fin de despertar deseo al resaltar sus evidentes bondades físicas.

De ese modo, lo que hace aquí le da en la yema del gusto a los varones adeptos al género y complace sin reparos sus tendencias sexistas, lo que la lleva a caer en el juego habitual de la industria pese a haberse convertido con “Criminal” en la mujer más vista con un video musical en YouTube a lo largo del 2017.

Por otro lado, el video cuenta con un alto nivel de producción, porque más allá de mostrar a la cantante en pleno lucimiento de sus curvas y de sus encajes mientras es seguida vía telefónica por un pretendiente (interpretado por Bad Bunny), se desarrolla en una mansión de Miami en la que se realiza una fiesta supuestamente universitaria que no se acaba ni siquiera con la llegada de la policía, porque, por supuesto, a estos agentes les encanta bailar la música que allí suena. Y nada del sarcasmo que podamos emplear eliminará el hecho de que, un día después de lanzado, el video supera los 8 millones de visitas. Ahí está.

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