Angélica María agradece a los dos países tras recibir su estrella

Secundada por unos globos amarillos y blancos que fueron soltados al cielo en determinado momento, una pequeña pero entusiasta multitud se reunió durante la mañana del miércoles en Hollywood Blvd. para acompañar a Angélica María durante la entrega de la estrella en el Paseo de la Fama para la legendaria actriz y cantante en el número 7060 de la misma avenida.

Aunque era de esperar que la llamada “Novia de México” fuera esencialmente recibida por personas procedentes del país vecino, se contó también con la participación de inmigrantes de otras áreas, como lo probó a gritos el asistente que interrumpió el discurso mismo de la señora -despertando con ello algún reproche- al exclamar: “¡Te queremos, mami! ¡Lo dice un dominicano!”

En todo caso, este hombre le puso la cuota de humor a un evento en el que no hubo nada impredecible, fuera del hecho de que la homenajeada se paseó algunas veces en un coche convertible por la avenida de los hechos antes de acercarse al podio; y lo curioso es que inicialmente nadie se percató de que lo hacía, hasta que el conductor (ella iba en el asiento del copiloto) empezó a tocar el claxon.

Una vez que le tocó ofrecer su mensaje de agradecimiento, la todavía llamada “Novia de México” había recibido ya varios halagos, por lo que aseguró que le iba a costar trabajo hablar debido a la emoción; pero dio de todos modos un discurso breve en el que dedicó este logro “a mi madre, a mi familia que me quiere tanto, a la hija maravillosa que me ha dado Dios y a estos dos niños que amo con locura”.

Con esta última parte, se refería a la también actriz y cantante Angélica Vale y a los dos hijos pequeños de la misma, quienes estuvieron presentes en la ceremonia y que se quedaron al final parados durante varios minutos para complacer los ‘flashbacks’ de los fotógrafos, lo que a nuestro concepto fue excesivo debido a su tierna edad.

Pero lo más significativo fue que la dama, que como se sabe nació en Nueva Orleans pero se crió en México y desarrolló ahí su carrera -aunque vive desde hace dos años en Los Ángeles-, agradeció no solo a la nación vecina, sino también a la del Tío Sam, llegando incluso a exclamar “¡Viva USA!” y a justificar la proclama porque es en este lugar donde se le ha dado el reconocimiento. “Es la primera vez en que me voy a sentir feliz de que pisoteen mi nombre”, dijo también con gracia.

En todo caso, el comentario que se podría haber prestado más a cualquier tipo de polémica fue el que hizo el joven intérprete Diego Boneta (“Rock of Ages”), quien recordó haber sido respaldado por Angélica María desde que tenía solo 12 años, cuando empleó sus palabras hacia la homenajeada para aludir al hecho de que “todos los [inmigrantes] que estamos aquí nos estamos partiendo la cara y mantenemos la sencillez”.

Por su lado, Vale, quien además de sus hijos llegó acompañada de su esposo Otto Padrón, le contó a la audiencia que su madre vivió de chica muy cerca del lugar donde se encontraban ahora, en Formosa. “Debes haber pasado tantas veces con mi abuela por aquí, sin sospechar que un día tu nombre quedaría marcado para siempre en estas mismas calles”, comentó.

“Dicen que los hijos escogemos a las mamás, y si es así, me veo muy lista”, agregó luego con una risa, antes de leer varias cartas de saludo que mandaron otros famosos, entre los que figuraban Gloria Estefan, su esposo Emilio y hasta Ricky Martin. Todos los que hablaron se unieron luego a Angélica María para develar la distinción enmarcada por una alfombra roja, mientras que un mariachi le daba color musical al proceso.