Experto pide impulsar en México cultura de prevención en salud para viajeros
La prevención en el campo de la salud para los viajeros internacionales es clave en el control sanitario de las fronteras y la vacunación es el mecanismo más efectivo para disminuir los riesgos a la hora de salir al extranjero.
Sin embargo, en México “la cultura de la prevención en salud en los viajeros es inexistente”, dijo hoy a Efe Jorge Baruch Díaz Ramírez, responsable de la clínica de atención preventiva del viajero (CAPV) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Tanto en México como en otros países en vías de desarrollo, las personas que viajan solo se preocupan por su salud cuando los países exigen alguna vacuna para ingresar en su territorio.
“Un 60 o 70 % de los viajeros que acuden a la clínica” lo hacen porque se van a desplazar a un país que exige una o varias vacunas, señaló el experto.
Las recientes epidemias de sarampión, ébola y zika han incrementado la necesidad de los viajeros de buscar apoyo sanitario previo a un viaje, “pero falta mucho aún”, apuntó.
Es por ello que la CAPV, que cuenta con sedes en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) y en el campus de la UNAM ubicado en el sur de la capital, trabaja para dar a conocer los riesgos que puede enfrentar un viajero en materia de salud.
“El 98 % de nuestra operación se centra en prevenir y reducir los riesgos de salud. La idea es abordar a los viajeros y tratarlos antes de que se enfermen”, porque los males más comunes están ligados “al itinerario y al motivo del viaje”, indicó.
“La clínica está atendiendo a entre 2.000 y 3.000 viajeros por año, pero por lo menos al AICM llegan unos 40 millones de viajeros anualmente, entonces ni siquiera es el 1 % de la población”, detalló.
El doctor explicó que el primer paso se lleva a cabo por internet, a través de un formulario en el que se pide información sobre la condición sociodemográfica del viajero, su estado de salud y el viaje a realizar, a fin de hacer las recomendaciones generales necesarias.
Luego se solicita una consulta, que tiene un costo de alrededor de 700 pesos (38 dólares), mientras que el de la vacuna fluctúa entre los 300 (16 dólares) y los 3.000 pesos (164 dólares), dependiendo de la enfermedad que combata.
“La consulta consiste en: valoración del riesgo, recomendaciones sanitarias, vacunación, se habla de la quimioprofilaxis, es decir, los medicamentos que se pueden llevar y se les hace una recomendación del botiquín del viaje”, explicó el especialista.
La clínica se ha esforzado por ampliar la información para viajeros, por lo que se ha enfocado en aerolíneas, agencias de viajes y operadoras turísticas para promover sus servicios.
“Es importante tener un plan de prevención para reducir los problemas de salud”, aseguró Díaz Ramírez, quien resaltó la necesidad de que los viajeros acudan por iniciativa propia a una revisión médica antes de emprender su recorrido.
