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La fiebre rubia de Puerto Rico se apodera de Dodger Stadium para la final del Clásico Mundial  

(MIKE NELSON / EFE)
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Las cabelleras y barbas blanqueadas han sido toda una sensación durante el extraordinario paso que el equipo de Puerto Rico ha tenido en el Clásico Mundial de Beisbol 2017. Lo que empezó como una muestra de hermandad entre los jugadores boricuas, terminó resonando con sus aficionados, quienes convirtieron el gesto en una moda.

La tarde del miércoles a las afueras de Dodger Stadium previo a la final del torneo entre Puerto Rico y los Estados Unidos, el tinte rubio brilló igual de fuerte que el sol californiano que se asomó entre las nubes.

Jed Domínguez, quien en la mañana llegó a Los Ángeles desde Caguas, Puerto Rico para seguir de cerca a su selección, le comentó a HOY Deportes que ya lleva una semana con su barba blanqueada y que toda la Isla del Encanto se ha dejado llevar por la “fiebre rubia” que se ha desatado.

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“Ha causado una conmoción, todos se han pintado el pelo”, indicó Domínguez. “El que no tiene pelo se pinta la barba, el que no tiene barba ni pelo, se pinta las pestañas o las cejas. Eso es apoyar al equipo”.

Víctor Miranda, también de Caguas que lucía una cabellera completamente rubia, ve esta moda como un talismán que ha impulsado a los isleños a llegar lejos en la justa una vez más como en 2013. También ha servido para que los fanáticos se sientan parte del “Team Rubio”.

“Esto ha sido algo positivo para el equipo, es algo que ha significado mucha suerte”, expresó Miranda. “Es algo que nos ha hecho sentir más cercanos a la causa cada día”.

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