El futbol sigue creciendo en EE.UU. pero todavía le falta

El sábado pasado, Manchester United y Real Madrid disputaron un encuentro de pretemporada en Michigan Stadium en Ann Arbor como parte de la Copa de Campeones Internacional Guinness, ante una entrada de 109,318 aficionados. En los periódicos, redes sociales y noticias en general, todas mencionaron la muy usada frase de que “el futbol está creciendo en Estados Unidos” y que ésta era una prueba más.

¿Pero deberíamos estar sorprendidos de que 109,318 aficionados sienten curiosidad por ver al Manchester United y al Real Madrid? El interés por estos gigantes de Europa siempre ha existido en este país lleno de inmigrantes, pero a lo mejor es que apenas los medios se están dando cuenta.

Eso sí, el hecho de que estos clubes prestigiosos estén haciendo pretemporada en Estados Unidos es gracias al crecimiento de la MLS. Los promotores se han dado cuenta que pueden hacer dinero y se han animado a traer equipos del máximo nivel.

Ahora, el gran reto del futbol en Estados Unidos, es cómo llevar ese entusiasmo o curiosidad de la gente que acudió a estos partidos a un Columbus-Portland o un Chivas USA-LA Galaxy.

La buena noticia es que ya existe mucha afición que vio los partidos de Estados Unidos en el Mundial. La mala noticia es que algunos de estos solamente ven esos partidos porque el Mundial está de moda y otros aún no les importa la MLS.

Por otro lado, también se escuchan las fantásticas noticias de que jugadores como David Villa y Frank Lampard ya firmaron con el New York City FC, equipo que ingresará a la liga en 2015. Ronaldinho parece estar en camino y otras estrellas de renombre probablemente llegarán a una liga en donde ya hay jugadores de la talla de Thierry Henry, Robbie Keane, Clint Dempsey, entre otros.

Sin embargo, aunque esto es bueno, también faltan muchas cosas por hacer, que no necesariamente aparecerán en las primeras planas de los diarios.

Una de esas cosas importantes es elevar el salario del jugador promedio de la MLS, para que el nivel de éste aumente. Entre el jugador promedio de la MLS y el jugador promedio de una liga europea hay mucha distancia y se notó en el 7-0 del Manchester United al LA Galaxy.

No hay que olvidar que el éxito futbolístico de cualquier nación tiene que ver con generar buenos jugadores. Estados Unidos aún no tiene una buena estructura para desarrollar jugadores que se asimile a grandes potencias como Alemania y Holanda, dos de las mejores escuelas de futbol.

Sin esa estructura será difícil seguir encontrando a los Landon Donovan en este país y tal como lo hace el entrenador actual, Jurgen Klinsmann, estará buscando talento extranjero para que jueguen en el equipo nacional.

Una vez que las academias mejoren, entonces el crecimiento deportivo estará a la par con el crecimiento en la estructura de estadios y aumento de equipos.

Pero todo es cuestión de tiempo y eso es lo que sobra en este país.