Cómo aprendí de superación, gracias al equipo 73 del mundo

“No puedes vencer a una persona que nunca se da por vencida”, dijo ‘Babe’ Ruth en 1940; y así como el ‘Gran Bambino’ yo he aprendido a prevalecer a base de trabajo y esfuerzo, mucho esfuerzo. Es por eso que sigo de cerca aquellas personas o instituciones que puedan inspirarnos a mejorar y por eso aquí les comparto cómo aprendí de superación, gracias al equipo 73 del mundo según la FIFA: San Cristóbal y Nieves.

Ser mejor cada día debería de ser un compromiso de todos los seres humanos, pero la verdad es que es algo tan complicado que el éxito está garantizado solo para pocos; por eso siempre es bueno buscar algunos modelos a seguir para seguir desarrollándose como hombre y como habitante de esta bendita tierra.

Así con esas poéticas palabras, comencé a hablar con mi amigo Atiba Harris, mediocampista del FC Dallas y exseleccionado nacional de la nación caribeña de San Cristóbal y Nieves, para intentar encontrar el secreto del éxito a base de esfuerzo. Ser representante de uno de los países más pequeños del continente americano no es fácil. Hay que dejar atrás a la familia y los amigos y embarcarse hacia otros países que no hablan el mismo idioma. Pero Harris lo hizo posible y sacrificó todo para comenzar a jugar profesionalmente en España, antes de mudarse a los Estados Unidos para participar con Chivas USA, Colorado Rapids, FC Dallas, entre otros.

“Este ha sido un año grandioso para mí personalmente, para mi club y para mi país”, me presumió el futbolista y hasta ayer capitán de su selección, “ganamos algunos trofeos a nivel club y en naciones logramos el ranking más alto de la FIFA en la historia de mi país”.

¿Pero cómo una nación tan pequeña logró convertirse en la sexta mejor de Concacaf?

“La federación ha invertido mucho gracias a la ayuda de Jacques Passy, que ha sido clave para el éxito de nuestro país. Tenemos mucho talento en esta pequeña nación y si podemos estructurar un plan de manera correcta, podríamos competir por los mejores honores del Caribe y de la Concacaf algún día”, me comentó Atiba con mucho orgullo. Agregó que para llegar a donde están, y eso que todavía le falta mucho por escalar a sus connacionales, “se ha invertido mucho en entrenadores, enviándolos a grandes países para que tengan más conocimientos y profesionalismo”. Incluso dijo que, con el tiempo, mucha educación y gran trabajo por parte de los suyos en algún momento “estaremos en la Copa Oro o la Copa Mundial”.

¿Entonces, solo es trabajar sin parar hasta lograrlo? Para el sancristobaleño es cuestión de amar lo que haces, ya que “representar a mi país ha sido un gran honor. Jugar por la selección nacional es un privilegio”. Y es así como el mediocampista del FC Dallas piensa que el ser humano se supera cada día: a base de mucho trabajo, mucho esfuerzo, pero sobre todo nunca dejarse vencer y siempre luchar por lo que uno quiere.

Así, Atiba Harris envía un mensaje a todos los que crean que están en equipos pequeños y que quizás no tienen muchas oportunidades de éxito. “Eres un embajador”, añadió con mucha emoción por lo que le espera en su carrera, “así que aprovecha el momento y ve a pelear por lo que tú quieres”.

San Cristóbal y Nieves seguirá escalando puestos en el ranking de FIFA, pero hasta el momento es uno de los casos de éxito más notables del futbol y que muchos no se han dado cuenta; subiendo desde el peldaño 175 en 1994 hasta el 73 en octubre de este año y colocándose por delante de países como Jamaica y Honduras. Esta nación caribeña tiene que ser seguida muy de cerca, ya que así aprendí de superación, gracias al equipo 73 del mundo.